Casi tres mil camiones parados es la cifra de una sola empresa (unidades 0 Km), pero también, un dato relevante de la dura crisis que atraviesa la industria automotriz en general.
Estos casi tres mil camiones parados corresponden al stock que Iveco Argentina tiene en sus playas –listos para entregar-, provenientes de su propia fabricación y de importación.
El dato se conoció a través del sistema Sioma que, con una clave, utilizan los concesionarios agrupados en ACARA y que, por primera vez, llegó a los medios periodísticos.
El listado incluye a todas las automotrices presentes en el mercado argentino, sin diferenciar de qué tipo de vehículo se trata (automóviles, utilitarios, camiones, etc). Por ello, empresas como Mercedes Benz o Volkswagen, figuran con volúmenes de stock que incluyen todos sus productos.
Pudiendo diferenciarlos, para el rubro pesados, figuran Iveco, Scania, Agrale y Volvo, todas ellas con un importante stock acumulado de fabricación argentina o bien, importados, según corresponda.
Este volumen de “camiones parados”, se mide por cantidad de unidades y también por meses. Esta última cifra corresponde al promedio de patentamientos de los últimos dos meses (diciembre 2019 y enero 2020), y la proyección sobre “cuanto tardaría cada marca en vender dicho stock acumulado”.
Es decir, por ejemplo, Iveco –que acumula 2.728 unidades en sus playas y/o depósitos-, tardaría 11,6 meses en comercializarlos. En tanto Agrale, otra de las empresas que produce en el país, con un stock de 268 unidades, tardaría 4,4 meses en “deshacerse” del acumulado.

Las cifras se explican solas, por un lado, la crisis del sector: aumentos permanentes, alza del dólar, alta inflación y merma del volumen transportado (ver último informe de Fadeeac); y por otro, la falta de financiación accesible para bienes de capital o herramientas de trabajo como son los pesados.
Estos camiones parados representan para las empresas un costo financiero importante, ya sea por el dinero que insume la custodia, seguros y los propios costos de producción que se traduce en “dinero parado”.
Aunque el dato es nuevo, como dijimos, por primera vez se da a conocer, lo cierto es que, aunque las tasas de interés hayan bajado con el nuevo gobierno, estas siguen siendo altas para la actividad en general, ya sea el transporte o la producción/importación de pesados.
Si bien la cifra corresponde a las empresas automotrices que tienen camiones parados, nadie ignora que también, son muchas las empresas transportistas que tienen camiones en depósito y en la misma situación, debido a la baja del volumen transportado.
Aun así, es de esperar medidas urgentes que permitan la reactivación de todo el sector. Al fin de cuentas, los argentinos tenemos un importante entrenamiento en esto de atravesar crisis económicas y esperanzarnos en un futuro mejor.