Tras el congelamiento de los combustibles y el plan de mantener fijo su precio en las estaciones de servicio, las petroleras implementaron cupos.
Dichos cupos afectan al despacho de combustible para la red de estaciones de servicio, y a los grandes clientes del canal mayorista.
En el circuito mayorista, hoy con valores más caros que los surtidores, se ven afectados el agro, la minería y las grandes flotas del transporte.
Muchas grandes firmas del transporte de carga y pasajeros utilizan el canal mayorista para su provisión, y estos podrían volcarse a la venta por menor.
El congelamiento hasta el 1 de noviembre se impuso la semana pasada y con él, volvió una práctica que ya habitual en la industria.
Esto se debe a las distorsiones de precios y con los cupos se quiere evitar una sobredemanda en el canal minorista, incentivada por un menor precio.
Con la devaluación del 14 de agosto, que se trasladó parcialmente a las estaciones de servicio, en el canal mayorista los precios aumentaron un 25%.
En tanto, en las estaciones de servicio la suba inicial fue del 12,5%. Luego, el Gobierno logró acordar con las petroleras para fijar el precio.
Así, los grandes distribuidores que atienden el canal mayorista venden a un precio más caro que en el canal minorista.
Lo antedicho implica un cruce de canal de los clientes para comprar combustible para sus unidades a un mejor precio.
Si bien hay sectores beneficiados con la suba del dólar (22%), no sería extraño que también vuelquen sus compras a las estaciones de servicio.
Congelamiento y cupos
El año pasado, con el incremento del precio de la energía por la guerra Rusia-Ucrania y la demora en comprar los buques de gas, hubo faltante de gasoil.
En ese momento, con precios atrasados, las petroleras establecieron cupos para evitar el aluvión de compras fronterizas y también el “cruce de canal”.
A diferencia de lo que ocurrió el año pasado, no existe en esta oportunidad una crisis de abastecimiento. Con la sequía, el agro redujo su consumo.
La implementación de cupos consiste en despachar a cada estación de servicio un volumen de combustible similar al promedio histórico.
Si las petroleras debieran sobre abastecer la demanda minorista, esto implicaría una pérdida de rentabilidad para las compañías.
Con esto, las petroleras buscan evitar que el cliente del circuito mayorista no se pase al minorista
Estos cupos volverán a generar cruces entre las petroleras y los “estacioneros” que representan más de 80% de la red de venta de combustible.
De tal forma, las estaciones de servicio recibirán clientes del canal mayorista, que le brindará la posibilidad de mejorar su rentabilidad.
Según los estacioneros, el congelamiento les hacer perder contra la suba de costos por la inflación.