Un incendio, a bordo del Felicity Ace, puso a casi 4.000 autos de lujo a la deriva en medio del océano Atlántico.
El siniestro se produjo el pasado miércoles frente a las costas de las islas Azores, región autónoma de Portugal.
Se trata de un buque de carga de bandera panameña, operado por una naviera japonesa que transportaba autos de Porsche, Volkswagen, Lamborghini y Audi.
La magnitud del siniestro obligo a las autoridades marítimas portuguesas a evacuar a los 22 tripulantes de la nave, la cual quedó a la deriva.
Un bote salvavidas permitió que la tripulación pudiera ponerse a salvo, para luego ser recogida por el buque petrolero Resilient Warrior.
Luego, personal de la Armada y la Fuerza Aérea portuguesas se hicieron cargo de la evacuación y posterior traslado a un hospital de islas Azores.
De tal forma, el buque quedó a la deriva y el incendio sin control. Hasta el momento, no trascendieron las causas del origen del voraz incendio.
Un incendio y una preciada carga
El Felicity Ace, con su preciada carga de 3.965 vehículos, se dirigía a Norteamérica fletado por el Grupo Volkswagen, desde el puerto de Emden, Alemania
Porsche Cars Norteamérica debía recibir buena parte de la carga, la cual debía arribar al puerto de Houston, en el estado deTexas.
Hasta el momento, las automotrices no brindaron mayor información, pero aseguraron no tener conocimiento de que haya heridos entre la tripulación.
Mientras estas se mantienen en contacto con la naviera, sus concesionarios en EE.UU. ya se contactaron con sus clientes para informarlos del problema.
La naviera japonesa Mitsui OSK Lines, no brindó mayor información, pero pudo saberse que estaban realizando los arreglos para remolcar el buque.
Mientras el Felicity Ace continúa ardiendo, la Armada portuguesa informó que una patrullera oceánica permanece en el lugar monitoreando el barco abandonado.
El Felicity Ace fue construido en 2005, mide 656 pies de largo y 104 pies de ancho, con una capacidad de carga de 17,738 toneladas y cerca de 4.000 vehículos.