A pesar de un contexto económico difícil a nivel mundial, un magnate de la tecnología invierte en dos empresas de logística y transporte.
En efecto, Bill Gates invirtió 373 millones de dólares en FedEx y Paccar, un gigante de la logística mundial y un líder de la industria pesada.
El cofundador de Microsoft invirtió tal suma a través de su Fundación, un fondo con el cual administra 45 mil millones de dólares.
Como muchas otras, las compañías elegidas por el magnate enfrentaron importantes crisis, pero igualmente, sus perspectivas futuras lograron captar su interés.
Según los especialistas, la decisión del magnate se asocia a una mejora en la economía y los cambios en las tasas de interés que se avizoran.
Además de ello, seguramente, Gates consideró que ambas empresas aspiran a reducir sus costos drásticamente y lograr un menor impacto de sus actividades.
Sobre la base de la sustentabilidad, ambas empresas ya trabajan en la incorporación de vehículos autónomos y electromovilidad, además de otras tecnologías sustentables.
La inversión de Gates valoriza la importancia del transporte pesado y la logística, dos pilares fundamentales de la economía y motores de su crecimiento.
El sector del transporte no ha sido inmune a los efectos de la desaceleración económica global, lo cual afectó la demanda de sus servicios.
En el caso de Paccar, los ingresos del tercer trimestre de 2024 se redujeron un 5,2 % en comparación con el año anterior, alcanzando los 8.240 millones de dólares.
Ya en el cuarto trimestre del 2024, la demanda de camiones aumentó un 21 %, lo cual generó un moderado optimismo de los inversores.
En cuanto a FedEx, sus acciones se revalorizaron en el 2004, pero afronta el desafío de reducir costos por 2.200 millones de dólares en 2025.
